Grafitti

Porque el mundo es un letrero y la mirada
no sabe descifrar sus instrucciones (1). Un letrero debajo de la lluvia con la tinta borrosa:
la palabra “césped” (4) cayendo al hormiguero, la palabra “pisar” cubierta de inscripciones;
y los demás quién sabe (5),
lejos (2), como una carta de amor
escrita en el aire con los labios.

El mundo es una canción que se pierde en la radio sin que nadie la
extrañe (6).
La moneda que frotaste (8) en tus manos de niño hasta que fuiste a la tienda y te dijeron
que ya no tenía valor porque no tenía dibujos.

El mundo es una esfera,
un escritorio y mucho polvo (9), un calendario con los días decapitados;
sábados largos como una carretera (10)
por donde se camina mientras (11) pasan coches rápidos,
lunes y miércoles de cinta en el zapato (7)
como si no hubiera ya bastantes (3) nudos.

El mundo es un letrero sin vocales, un árbol que florece detrás de la pared, una fruta que nunca madura en nuestros
patios.

El mundo es nada más este decir y decir y decir que no se escucha.
Que hablen más fuerte, por favor.

(HERBERT, Julián. Álbum Iscariote . México, D.F.: Editorial Era, 2013.)

A ideia central do poema é